El bueno de Mitsu estuvo a punto de perder la vida en la carretera, después de que algún desaprensivo no tuviera ningún reparo en abandonarlo allí a su suerte. Teniendo en cuenta que el perro está prácticamente ciego, eso suponía condenarlo a una muerte casi segura. Afortunadamente, Mitsu debe de tener un Ángel de la Guarda con bastantes contactos y ahora se encuentra a salvo con nosotros en el albergue.
No obstante, su avanzada edad y sus problemas de visión hacen aún más difícil la adaptación a su nuevo entorno. Su ojo derecho está en muy mal estado y probablemente haya que extirpárselo, y del ojo izquierdo está prácticamente ciego. Tras una ardua labor en el salón de peluquería, conseguimos cortarle el pelo a fondo para poder llevar a cabo un aseo y reconocimiento médico en condiciones. Lo malo es que, tan delgadito y sin pelaje, Mitsu está pasando algo de frío, aunque le hemos convencido para ponerse un abriguito.
Mitsu necesita un hogar, una oportunidad de pasar la última parte de su vida conociendo lo que es el cariño, los cuidados y atenciones de un buen dueño. Pese a que se acerca a nosotros para pedirnos caricias, en el albergue llora y tiembla con frecuencia y se muestra algo desorientado. Adóptalo o acógelo en tu casa. Su cariño y agradecimiento serán la mejor de las recompensas.
Si estás interesado/a en adoptar o conocer más a Mitsu, puedes solicitar información pinchando aquí.
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