miércoles, 24 de abril de 2013

"Los canes al sol" (II)


¡¡Cómo se nota que ha llegado el buen tiempo!! Ha sido ver los primeros rayos de sol y algunos de nuestros peludos más osados se han puesto manos a la obra para broncearse, que luego no quieren ser los más blancos de la playa. Ahí tenéis a Lupina, Dalila y Choni en nuestro 'solarium' particular, tratando de coger un poco de color, que los inviernos son muy largos en Segovia y hay mucho que recuperar. Sí, por si os lo estabais preguntando, les permitimos hacer 'topless', pero esperamos que nadie vaya a escandalizarse a estas alturas...
Es posible que Choni y Dalila no estén con nosotros dentro de poco, pues ambas han tenido la suerte de ser reservadas y les deseamos lo mejor de lo mejor. Seguro que Lupina las echará de menos en estos ratos de sol, en los que las tres aprovechaban para comentar todos los cotilleos que se cocían en el albergue. Ojalá ella pueda compartir la misma suerte de sus compis y encontrar un hogar.


Desde que fuese abandonada por no valer para la caza, Lupina ha perdido bastante confianza en el ser humano y se ha vuelto un poco tímida y miedosa. Es muy tranquila y le encanta tumbarse en lugares cálidos, ya sea junto a la estufa en invierno o, como podéis ver, al sol que más calienta. Necesita un dueño cariñoso y comprensivo, que le proporcione la vida digna que se merece y que hasta ahora no ha podido disfrutar. Seguro que no anda muy lejos...

Si estás interesado/a en adoptar o conocer más a Lupina, puedes acceder a su perfil pinchando aquí.

miércoles, 3 de abril de 2013

Darko, del asfalto a la vida


Muchos son los perros abandonados que terminan sus días en la carretera, unas veces muriendo en el acto al ser atropellados y otras, sufriendo durante largas horas los terribles dolores que acarrea un impacto de esas características. Éste último habría sido el caso de Darko si no fuese porque un joven, viendo que nadie se paraba a socorrerle, lo hubiese recogido y traído al albergue.
En un primer momento, nos pareció que sólo sufría una fuerte contusión, pero las radiografías revelaron algo bien distinto. Hasta siete roturas en cadera, pelvis o coxis, además de serias heridas y quemaduras, que  requerían una delicada y costosa operación. No queríamos negarle una segunda oportunidad a un animal por simples motivos económicos, así que seguimos adelante con el tratamiento.


La verdad es que no hay mejor recompensa para ese esfuerzo que estas fotos de Darko. Ha estado alrededor de un mes en rehabilitación y ahí lo tenéis, saliendo ya a dar sus primeros paseos por el patio. Su condición de Podenco le hace ser un tanto introvertido y desconfiado, algo que suponemos se habrá visto acentuado con esta dura experiencia, pero seguro que poco a poco cogerá confianza, recuperará su lustrosa melena de las patas traseras y estará listo para encontrar un buen hogar. Nosotros haremos todo lo que esté en nuestra mano para que lo consiga, eso por descontado.


No sabemos de dónde procedía Darko, pero por la zona en la que fue recogido, posiblemente venía de las huertas de La Granja de San Ildefonso, donde muchos cazadores tienen perros de este tipo de razas sin apenas control ni vigilancia y con el beneplácito de las autoridades. En este caso, Darko ha tenido la enorme suerte de haber dado con alguien que se molestó en recogerlo y buscar la ayuda necesaria, pero puede que el próximo no sea tan afortunado. ¿Hasta cuándo se seguirá haciendo la vista gorda?