martes, 17 de septiembre de 2013

Vega: "Soy todo oídos"


Mucho ojo con revelar algún secreto si esta perrita anda cerca, porque no se le escapa una. Y es que, con unos pabellones auditivos de ese calibre, nuestra querida Vega está al tanto de todo lo que se cuece en el albergue. Ese rasgo físico propio de su raza (Podenco) le aporta un aspecto muy particular y la convierte en uno de los peludos más llamativos del grupo. Una lástima que esas orejas no hayan podido escuchar lo que tanto tiempo llevan esperando: "Vámonos a casa, Vega". Pero seguro que su porte aristocrático, su considerable altura y su fibroso cuerpo acaban conquistando a más de uno.


Poco tiene que ver la perrita asustadiza y desorientada que recogimos cerca de una carretera con la cariñosa, sociable y segura de sí misma que encontramos hoy en el albergue. Su adaptación fue muy rápida, tanto con nosotros como con sus compis. Resulta evidente que Vega no ha recibido demasiados mimos antes de conocernos, pues se muestra muy agradecida ante cualquier pequeña caricia que le hacemos. Tampoco lo delgada que estaba cuando llegó parece indicar que haya tenido una vida fácil, pero aquí estamos nosotros para cambiar eso, ¿no?


Vega se merece una segunda oportunidad, una oportunidad de ser feliz, de recibir el mismo cariño que entrega y de llevar una vida en la que el miedo no tenga cabida. Eso sí, nos ha dejado bien claro que no le interesa la caza ni nada que tenga que ver con ella, así que abstenerse cualquiera que la pretenda usar para tal fin. Lo único que Vega quiere cazar es su sueño de encontrar un hogar.

Si estás interesado/a en adoptar o conocer más a Vega, puedes acceder a su perfil pinchando aquí.